“La salida es muchas veces confundida por las personas y
terminan optando por lo que llaman salida y no es nada más que una forma más de
postergarse… Se busca paliar el vacío Espiritual por diferentes adicciones que
solo tapan ó retrasan la enorme angustia existencial del ser. Nada de esto
sirve realmente, nada de esto es beneficioso ni disipa la pesadez de sentirse
desconectado de la Divinidad. Todo lo contrario, aumenta la desesperación a
medida que pasa la vida, exalta el temor y el terror a la finitud. Todo es
parte de la soledad Espiritual que tienen los que se quedan transitando las
opciones que nos dan quienes mantienen intereses espurios y mezquinos,
haciéndonos creer que la vida es transcurrir los años sin colores ni verdaderos
motivos que nos lleven a mejorar nuestras existencias, transformándolas en
Néctar y felicidad, llevándolas a ser algo digno de ser transitadas y vividas.
Sucediéndose así, las mismas horrorosas acciones que se repiten una y otra vez
generación tras generación, coincidiendo más que nada en el fracaso humano de
todos los tiempos. Quizás sea el tiempo de despegue, quizás sea el momento de
decidirse y volar… Se necesita coraje y audacia para dejar de lado la
mediocridad adquirida desde siempre. Se necesita valor para soltarse y ampliar
la Conciencia, soltar el pasado, generar un presente para que no se tenga un
futuro incierto, que nada trae si no llega. Todo puede realizarse en esta vida,
todo puede ser cumplido si hay ganas de generar y asumir la realidad. Así es que entonces podemos cambiar cualquier
realidad de vida, podemos dejar de lado todo lo que sabemos es veneno. Con un
simple cambio de Conciencia, todo esto se torna veraz, todo se vuelve real,
todo puede ser vivido.”
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