"LA JAPA"

YADU GOPALA DAS (VARKALA-INDIA-2012)

"El japa es un rosario de cuentas con 108 abalorios muchos entendidos dicen que suele representar los 108 templos del Señor Krsna, otros dan otras teorías al respecto, la mía es como sigue: En muchas tradiciones hindúes se suele decir que hay 108 posibilidades de reencarnación como seres humanos, entonces estas reencarnaciones son en sí los abalorios de cuentas de la Japa-Rosario, y cada uno de estos abalorios representan una reencarnación posible ya vivida, y lo que hacemos cuando nos paramos a rezar en cada una de estas cuentas de Tulasi, es rememorar esa vida ya pasada, esas circunstancias ya vividas, ya cumplidas, ya acabada. Al pararnos limpiamos nuestros actos, como lo sujetamos para que no puedan escapar, nosotros dueños, de alguna manera de esa reencarnación pasada, tenemos la posibilidad de mejorarlos desde esa urna de tela, desde ese saco sagrado de tela. Lo volvemos a revivir, lo atrapamos con nuestros actos actuales y lo elevamos en dicho momento sagrado de rezo a la Divinidad. Nosotros lo cogemos con los dedos  de Saturno y Venus (como queriendo decir que con el Amor a Dios se libera uno del Karma), pues si Saturno en (Sani) la Mitología Griega simboliza el Karma y el Destino y Venus (Sukra), es el Amor Universal que lava los pecados de los hombres al transportar los rezos de los seres a la Divinidad (Krsna), entonces ellos dos se encargan de ir limpiando en cada una de las rondas que vamos cantando el Maha-mantra Hare Krsna, es como si quisiéramos elevarla a la cúspide de lo sagrado y con ello sacralizamos dicha reencarnación. Recordemos que al cantar el Maha-mantra Hare Krsna lo que hacemos es rememorar esas edades primordiales en la que estamos junto a la Divinidad, y cuando caímos en el estado material de espíritu reencarnante debido a nuestra ignorancia ignata, nos olvidamos de que somos uno con la Divinidad. Ahora al sumergirnos en dicho mantra rememoramos la dicha de la unión con lo sagrado de la Creación Divina. Cantamos para despertar nuestra conciencia a lo elevado que hay en nosotros. Rezamos con ansiedad, rezamos con ignorancia, rezamos con limpieza, rezamos para que algún día reencontremos esa música verdadera que ya estaba antes de nuestra primera existencia. Algunos tratan o quizás la mayoría buscan con ese canto del Santo Nombre del Señor, un consuelo a sus pecados pasados. Una vuelta al principio, al Tiempo primordial, nos recogemos en silencio, para lavar los pecados de dichas reencarnaciones pasadas, para tratar de llevar el alma humana a esas Gopis que tanto aman a Krsna, que tan entregadas a Él están. De alma humana nos vamos elevando a Gopis de amor por Krsna, de ignorancia a entrega total.

Así vamos alcanzando meta tras meta elevados cúmulos de espiritualidad, y así lo que antes fue ya no es, y sin maldad  ya acumulada, con el alma limpia nos desprendemos de ese Karma acumulado vida tras vida, sin pasión,  sin importar ya más el Karma, sino más bien llevando a otras almas a esas cumbres de purezas elevadas, de puro aire sagrado y de pureza total.

Recogemos nuestra mano derecha y la sumergimos en el Tiempo Sagrado, pues también el Tiempo participa silencioso, callado, pero dando lugar a la ejecución de pureza. El Tiempo, la mano derecha, los dedos pulgar y anular, descartando el dedo índice se excluye sacándolo de la bolsa, pero en una actitud de retraimiento, en actitud de recogida en sí mismo, la bolsa que pende del cuello y el Maha-mantra Hare Krsna son la culminación de la purificación también entra en sí la boca con todos sus elementos  (la lengua, los dientes, los labios y el rostro). Todos ellos forman dicha culminación de pureza. Son los elementos mecánicos de purificación. Veamos como cada uno de ellos participa de ese Tiempo Sagrado, de como ayudan al alma a recorrer los senderos que antaño ya recorrieron.

Por una parte vemos que la bolsa pende del cuello, con si de unos testículos puros (y digo puro para que no se preste a engaño, ni a malas interpretaciones),  se tratara, pues junto con el dedo índice que queda excluido de la bolsa pues es sometido por el juicio de los otros dedos de la mano a salir de ella, forma un sexo puro pues el índice representando a Júpiter (ser exuberante en la Creación). No trata de buscar nada, sino señalando a las interioridades del corazón, busca o llama a su presencia a las distintas reencarnaciones ya vividas. Pues si vemos en el simbolismo del dedo índice con la bolsa,  que forman juntos unos testículos con un pene no erecto, sino en aptitud de recogimiento, pues si consideramos a dicho dedo como la flecha de Eros que busca la satisfacción de sus deseos señalando el objetivo o buscándolo ansiosamente, en este caso solo señala al corazón donde se encuentra la Divinidad, con gran respeto este dedo se repliega sobre dicha Divinidad en aptitud de plegaria, indicando solo dicha aptitud. Dicho dedo es también el dedo de acusación, por este mismo hecho queda excluido de dicha bolsa sagrada. Pero aquí no se acusa a nadie, solo tratamos de llamar una tras otra, al pasar las cuentas de abalorios en el rezo, a cada una de esas vidas ya vivida. No con el tono de acusación que muchos piensan que tiene este dedo, el trata solo de llamar para que así la pureza de cada una de las vidas anteriores se vayan limpiando, el solo las llama, no las acusa.

Queda este dedo índice en actitud de recogimiento, por su misión de señalar en este caso no el de acusar, llamar a presencia del devoto, a esa vida anterior que representa el abalorio que sujetan los otros dedos (pulgar y anular). Así vamos reciclando nuestras vidas pasadas, y la vamos purificando, por lo que el Karma queda paralizado, aunque no totalmente.

Los testículos que representan las bolsas son los hijos del devoto (sus vidas anteriores), que como espermatozoides van viniendo a la creación al ser llamado por el dedo índice.

Nosotros vamos dando vueltas tras vueltas al rosario de cuentas de Tulasi, y así vamos purificando cada una de la vidas anteriores. Si comprobamos que la bolsa está suspendida del cuello, comprobamos que el sexo animal queda excluido por un sexo anexo sagrado, pues al cantar el mantra Hare Krsna, con los labios y todos sus órganos, todo va quedando purificado (los familiares, el corazón, la mente, los órganos de los sentidos, los órganos mecánicos, etc.).

El sexo animal  queda excluido, debido a que estamos realizando el sexo sagrado, (si podemos llamarlo así), ya que en cierta manera es un sexo simbólico, pero que pende de algo más elevado que las entrepiernas. Queda a la altura del ombligo (lugar del fuego, o donde se ubica el chakra ígneo), y pende del cuello, donde se encuentra el chakra espiritual.

El Japa es el  símbolo de Shiva y de Brahma, pues estos dos Dioses, son los que rezan a la Divinidad con más frecuencia, según los textos sagrados. Si analizamos a dichos Dioses, vemos que Shiva es el Dios de la austeridad y del sacrificio aparte de que rige la rasa de la ignorancia, y Brahma es el que rige la rasa de la pasión, además de ser el Creador del Universo material. Viendo a dichos dioses vemos que Shiva es casto por naturaleza, de Él no viene nadie no tiene hijos con participación femenina. Sus hijos son de Luz Divina, sin madre, así como su esposa (de variadas formas) casta a la vez y austera.

Luego el devoto busca la castidad, la austeridad, la bondad, la inocencia primigenia, y la pureza de actos.

El sexo está excluido, al menos el sexo físico, pues el camino de la religión conduce a la pureza y a la castidad. La lengua se lava al rememorar el Maha Mantra Hare Krsna, los dientes pierden su dureza (los familiares), el paladar y la caverna de la boca se convierten en una reunificación de sabios. Los oídos se purifican al escuchar dicho canto. La mente entra en  armonía con la naturaleza, y ésta que siempre fue sagrada, es percibida por el devoto.

Los actos del devoto se van purificando al encontrarse a sí mismo en cada uno de los abalorios de Tulasi, sus actos son de gran humanidad. Ya no actúa sin control sino que Krsna llevando el carro de Arjuna se hace cargo de todos sus actos. Como dando lugar a la santidad del devoto. Pero para dicha santidad debemos desprendernos de nuestros egoísmos y de muchos oportunismo, pues si pensamos que ya con dicho canto nos purificaremos del daño que vamos causando a los demás estamos muy equivocado.

Debemos tener en cuenta que los abalorios del rosario van desde un grosor mayor a uno menor, lo que podemos con ello significar es una escalera de ascensión, como un grosor en la calidad del devoto. A medida que avanzamos en los  rezos diarios vamos escalando las cotas de alturas espirituales simbolizadas por los abalorios más gruesos de este modo vamos escalando paulatinamente uno tras otros los grandes enigmas de nuestras existencias, de tal modo, que al tenerlos presas en nuestros dedos vamos de nuevo viviendolos como si fuesen originales, y los otros anteriores quedan relegados o destruidos por los mantras, asi poco a poco, como ya he dicho, vamos purificando nuestra alma.

Una vez alcanzada la última cuenta del rosario (japa), nos encontramos con la llama blanca, que se encuentra en la cuspide del japa, aqui cantamos un nuevo mantra y recitamos otras plegarias. La llama blanca representa lo sublime, el que nos purifica realmente en cada abalorio-cuenta. La llama es blanca hecha de algodón, como llama representa el espíritu inmaculado, y como algodón representa la vestidura de nuestra alma. Así juntos el alma con el espíritu vamos siendo conducidos por este ultimo hasta alcanzar la verdadera purificación. El alma es presa del karma, pero el espiritu no es afectado por el, conducidos entonces el alma por el espíritu vamos ascendiendo los planos mas elevados de la espiritualidad. Y una vez que hemos alcanzado la llama, volvemos a reinicializar de nuevo el japa, desde el primer abalorio de cuenta, así volvemos a ir limpiando las pequeñas particulas de suciedad de nuestra alma, y así sucesivamente vamos otra vez ascendiendo hasta la llama. Algunos consideran que la llama es el encuentro con Krsna, y otros que es el espíritu del devoto.

Una vez realizada cada una de las rondas vamos hacia el cordón de abalorios exterior que suelen ser desde 16 hasta 22 abalorios, este cordón cuenta la cantidad de vueltas que el devoto ha dado a su japa. Para otros representan uniendo el 16 con las 108 cuentas del interior de la bolsa pues: 16.108 que son el numero de reinas que se casaron con Krsna, cuando Éste las rescató de su encierro. Podemos decir que son las reencarnaciones o posibilidades que tiene el alma de gozar con la Divinidad, también son el número de las Gopis que en Vrndavan juegan en el Lila de Krsna. Para mí son las 16.108 reencarnaciones que amando a Krsna todas ellas buscan con afán la integración con Él. Todos los espíritus aman a Krsna como las Gopis en Vrndavan, así al no haber nadie en la eternidad que no se encuentre en esta situación, todos los espíritus creados por Dios son Gopis algunos se van perdiendo en su comprensión, pero los que llegan a amarlo no siente nada salvo su separación, el AMOR de las Gopis es incondicional, no manchado por deseos humanos ni de conocimiento. Ellas lo aman pero cuando se les pregunta por algo que participa de conocimiento trascendental, ellas solo saben  que es Krsna lo demás no es necesario, pues lo que haria es quizás perderlo.

A muchas gopis en el momento de la separación de Krsna, se le preguntó al respecto sobre algunas preguntas comprometidas, pero ellas llenas de dulzura, solo contestaron con respuestas simple, eludiendo lo trascendental del hecho. Como si fuesen seres ignorantes así ellas aman a Krsna, ellas no saben si es o no la personalidad de Dios, sino que lo aman y no pueden vivir ni un segundo sin estar cerca de Él. Así Krsna ama tambien a la gopis, de tal manera que se divide en porciones plenarias, para que todas ellas tenga el mismo esposo. Las gopis piensan que Krsna está solo con ella, y Krsna esta con todas ellas como esposo, en cada uno de los palacios. Se casa pero cada una de las Gopis creen que es la unica elegida, pero todas ellas las 16.108 estan casadas con Krsna. Krsna las atiende, como si de un esposo se tratase. Así es el juego de cuenta. Todos las almas reencarnada participan del amor en Krsna, y cada una de ellas piensa que es la unica elegida. El palacio donde residen es el corazón donde está ubicado Krsna, muy dificil de ver e incluso con gran penitencia.

Todas están amparadas por su esposo Krsna, así las Gopis no buscan perderse en el mundo material sino que siempre estan atendiendo a su esposo Krsna. Y si su corazón tienen alguna duda, Krsna se las explica, pero ¿qué pregunta podemos tener cuando estamos con Krsna? Ya no hay preguntas, pues alli cada cosa esta con su respuesta, alli está todo el conocimiento, alli está toda la paz, el conocimiento, la dicha, el gozo, la luz...

Los neofitos suelen rezar unas 8 rondas, mientras que los devotos suelen hacerlo de 16 a 32. Los grandes avanzados suelen llegar a 64 rondas diarias. Pero todos ellos buscan lo mismo, alcanzar a Krsna. Sin Él no hay esperanza, pero Krsna, no solo se casa con los devotos, sino que también reside en el mundo material, salvando a las gentes de sus propias redes."

YADU GOPALA DAS